“sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del
mundo”“La Ascensión de Jesucristo a
los cielos para por el descenso de su Iglesia a los enfermos, a los marginados,
los empobrecidos, las mujeres maltratadas…”
(Javier Prat Cambra)
Estimada familia de san Francisco:
¡Dios asciende entre aclamaciones; El Señor al son de
trompetas! Hoy celebramos el día de la Ascensión del Señor Jesús a los cielos,
hasta la derecha del Padre. Cómo pasa el tiempo. Cuarenta y tres días desde que
celebramos la Resurrección de Cristo, toda una Pascua, prácticamente.
En esta ocasión el Faro se viste de
fiesta, se engalana para poder llevar a cabo esta celebración tan importante
para nosotros. Una celebración que debemos vivir desde la clave del compartir.
La Ascensión es para nosotros ese momento en el que Jesús nos une a él de una
manera mucho más fuerte que con su presencia física: de una manera espiritual.
Jesús nos une desde el Espíritu, de manera que gracias al Paráclito que
recibiremos la semana que viene permanecerá en nosotros hasta el final de
nuestro paso por este mundo. Después, nos llevará junto a él para que podamos
disfrutar, con el Padre, del Banquete Eterno prometido y de la compañía de los
santos. Vamos que no puede haber un futuro más esperanzador para nadie. Pero
¿vivo así dicho futuro? ¿Vivo desde la alegría y la esperanza del saberme
amado, respetado y valorado por Dios? ¿Vivo la alegría de su salvación?
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